Desde que tengo memoria me he enfrentado a la desigualdad por vivir con una discapacidad, he sentido y sido testigo del rechazo, la discriminación y exclusión. Situaciones que me motivaron a trabajar en un mundo más justo y empático para todas las personas.
Soy un idealista, estoy convencido que todas las personas somos distintas, pero tenemos el mismo valor. Soy alguien que lucha por las injusticias, que no se queda callado, que no está dispuesto a replicar y tolerar discursos y acciones de odio que por años hemos omitido y normalizado. ¡Soy uno de esos que llaman “locos” porque cree que puede cambiar el mundo!
¡Bienvenidx!